¿Cómo hablar sobre sexualidad con mis hijos?
Elisa Sainz • 14 de mayo de 2024

La sexualidad ha experimentado cambios significativos en su percepción, comprensión y aceptación social. Hace cien años, los tabúes, estigmas y la falta de información sobre sexualidad eran predominantes en muchas culturas. El tema era considerado tabú y se evitaba hablar de él abiertamente en la sociedad, incluso en el ámbito familiar y educativo.


Con el paso del tiempo, la sociedad ha experimentado una evolución hacia una mayor apertura y aceptación de la diversidad sexual. La educación sexual se ha vuelto más accesible y se reconoce como un componente importante de la salud y el bienestar general. Se han implementado programas educativos en escuelas y comunidades para informar a las personas sobre temas relacionados con la sexualidad, como la reproducción, la prevención de enfermedades de transmisión sexual y el consentimiento. A pesar de la apertura a este tema, aún hay muchas madres y padres que les resulta muy incómodo hablar sobre sexualidad. 


Puede que tú seas una de esas personas que de solo pensar que tienes que iniciar el tema sexualidad con tu hijo o hija te sientas abrumada y no encuentras las palabras correctas para abordar este tema, pero la educación sexual es una responsabilidad importante de los padres y, además, es parte natural de la vida, no hay nada de qué avergonzarse. Brindarles información valiosa sobre la sexualidad y ayudarles a entender aspectos relacionados con ella es una manera efectiva de equiparlos con el conocimiento necesario para vivir una sexualidad saludable.


Una de las preguntas más frecuentes es: 

¿Cuál es la mejor edad para hablar de sexualidad con mi hijo/a? 


El momento perfecto es ese en cual tu hijo o hija muestre curiosidad. Esto puede ocurrir a una edad tan temprana como los 3 años. Por ejemplo, un niño de 3 años puede ver a una mujer embarazada y preguntar ¿Cómo se metió él bebe en la barriga? Otra pregunta frecuente que ocurre por ejemplo alrededor de los 5 años es ¿Por qué las niñas no tienen pene? ¿De dónde vienen los bebes? ¿Dónde estaba yo antes de estar en la barriga? Todas estas preguntas suelen estresar un poco a madres y padres y por esa razón, hablo de este tema aquí, para ayudarte a estar preparada/o cuando surja el momento y que sepas dar las respuestas más efectivas posible. 


Aunque tu no hayas hablado antes del tema puede que ellos hayan escuchado de otros, así que mi sugerencia es que comiences por averiguar que saben ya. Si tu pequeño te pregunta ¿De dónde vienen los bebes? Tú, antes de explicar, puedes preguntarle: ¿De dónde tú crees que vengan? Toma su respuesta como base para dar una explicación y aclarar. 


Elemento impórtate a tener en cuenta para hablar de sexualidad con tus hijos: La edad.


Los niños de edad prescolar comienzan a tener curiosidad y aprender sobre su propio cuerpo. Es importante enseñarles los nombres apropiados de cada parte del cuerpo y no inventar nombres. No hay nada de malo en los nombres reales de las partes íntimas del cuerpo. Además, enseñe a sus hijos qué partes son privadas (las partes cubiertas por un traje de baño).


Según la edad de su hijo/a, de más o menos detalles en la explicación pero siempre, háblele con la verdad. 


Los niños alrededor de los cinco años suelen mostrar curiosidad sobre la sexualidad suya y la de otros de diferente género. Pueden comenzar a explorar sus genitales y manifestar interés por los genitales de otros niños, lo cual es una parte normal de su desarrollo. Es muy importantes que nosotros como madres y padres establezcamos límites y enseñemos a nuestros hijos sobre la privacidad y el respeto mutuo. Por ejemplo, explícale a tus hijos que algunas partes del cuerpo son privadas y que está bien tocarlas solo en privado, como al bañarse o vestirse. Enséñales a respetar su propio cuerpo y el de los demás, y enfatiza la importancia de comunicarse si se sienten incómodos.


Aquí te comparto algunas sugerencias sobre cómo abordar este tema de manera abierta y constructiva:


1-Inicia la conversación temprano: Es importante comenzar a hablar sobre sexualidad desde una edad temprana, adaptando la información a la edad y nivel de comprensión de tus hijos. Aborda temas básicos como el cuerpo humano, la diferencia entre niños y niñas, y el respeto hacia uno mismo y hacia los demás.


2-Crea un ambiente abierto y de confianza: Asegúrate de que tus hijos se sientan cómodos y seguros al hablar contigo sobre sexualidad. Hazles saber que pueden hacer preguntas y expresar sus preocupaciones sin temor a ser juzgados.


3-Sé honesto y directo: Utiliza un lenguaje claro y preciso al hablar sobre sexualidad, evitando eufemismos o conceptos confusos. Responde a las preguntas de tus hijos de manera honesta y sin evasivas, incluso si algunas preguntas te resultan incómodas.


4-Promueve el respeto y la responsabilidad: Enseña a tus hijos sobre la importancia del respeto mutuo, la comunicación abierta y la toma de decisiones responsables en relaciones sexuales. Explícales la importancia del consentimiento y cómo mantenerse seguros y protegidos.


5-Utiliza recursos educativos: Aprovecha libros, videos y otros recursos educativos diseñados para niños y adolescentes para complementar tus conversaciones sobre sexualidad. Estos recursos pueden ayudar a reforzar los mensajes clave y proporcionar información adicional de manera accesible y comprensible.


6-Fomenta la comunicación continua: La educación sexual no es una conversación única, sino un proceso continuo que evoluciona a medida que tus hijos crecen y se desarrollan. Mantén abiertas las líneas de comunicación y revisa regularmente los temas relacionados con la sexualidad a lo largo del tiempo.


7-Respeta la privacidad de tus hijos: Reconoce que tus hijos pueden sentirse avergonzados o incómodos al hablar sobre ciertos aspectos de la sexualidad. Respeta su privacidad y no presiones para hablar sobre temas que no están listos para discutir.


Al abordar la sexualidad con tus hijos de manera abierta y comprensiva, estás equipándolos con el conocimiento y las habilidades necesarias para tomar decisiones informadas y saludables a lo largo de sus vidas. Además, les estás demostrando que pueden confiar en ti para hablar sobre temas importantes y sensibles, lo cual fortalecerá su relación y su confianza mutua.


Si quieres saber más del tema, no dudes en escribirme y con gusto te ayudaré. 


Un fuerte abrazo de Elisa