
Muchos padres me han preguntado eso y mi respuesta por lo general es:
Nada, esa es la respuesta, porque los que están aburridos son tus hijos, no tú.
Yo soy mamá de dos y maestra de muchos pequeños y escucho varias veces al día:
- Estoy aburrido ¿Qué vamos a hacer? –
A esta pregunta siempre contesto con otra pregunta:
¿Qué quieres hacer tú para no estar aburrido?
Algunos niños pueden aportar alguna idea, pero otros simplemente te devuelven un (NO SÉ) cómo respuesta.
Pero hay algo importante que debemos tener en cuenta mamá y papá, si queremos que ellos solucionen este tema del aburrimiento por ellos mismos, debemos darle las herramientas. Puede ser muy difícil para una niña o un niño entretenerse solo cuando está acostumbrado solamente a recibir y seguir instrucciones. Recuerda, debemos ser congruentes con la educación que les damos y lo que esperamos que ellos hagan.
Aquí hay algunas frases que pueden ayudar a enseñarles a generar ideas y a pasar tiempo a solas sin necesitar que sus padres estén a su lado durante toda la actividad:
"¿Qué podrías hacer ahora que sea divertido para ti?"
Esta pregunta les invita a pensar en actividades que disfrutan.
"¿Recuerdas lo bien que te lo pasaste cuando [actividad]?"
Recordar momentos divertidos puede inspirarles a repetir esas actividades.
"¿Hay algún libro que te gustaría leer o una historia que te gustaría escribir?"
Fomentar la lectura y la escritura es una excelente forma de pasar el tiempo.
"¿Puedes construir algo con tus bloques o juguetes?"
Esto anima la creatividad y el pensamiento crítico.
"¿Qué juego podrías inventar con lo que tienes en tu habitación?"
Incentiva la imaginación y el uso de recursos disponibles.
"¿Qué tal si dibujas o haces una manualidad?"
Las actividades artísticas son una excelente manera de mantener ocupados a los niños.
"¿Puedes crear un espectáculo de títeres o un teatro de marionetas?"
Una actividad que puede involucrar mucho tiempo y esfuerzo creativo.
"¿Te gustaría aprender algo nuevo, como una canción o un baile?"
Aprender nuevas habilidades puede ser emocionante y absorbente.
"¿Puedes inventar una historia o un juego para compartir conmigo más tarde?"
Esto no solo les da una tarea, sino también un propósito al saber que compartirán su creación.
"¿Puedes hacer una lista de todas las cosas divertidas que te gustaría hacer esta semana?"
Ayudarles a planificar actividades futuras puede reducir el sentimiento de aburrimiento.
Al usar estas frases, estamos guiando a nuestros hijos a descubrir cómo pueden entretenerse de manera independiente. Además, les enseñamos a valorar su propio tiempo y a desarrollar habilidades importantes para su crecimiento personal.
Nuestro deber como mamá o papá es ayudarles a que aprendan a gestionar el aburrimiento o como aprovechar ese maravilloso tiempo en el cual ellos consideran que no hay nada que hacer. Guiarlos, ese es nuestro deber, no entretenerlos.
Si bien es cierto que también es nuestro deber dedicarles tiempo de calidad a nuestros hijos, no podemos crearles la dependencia de nuestra presencia para ellos pasar un buen rato de diversión o de descanso.
Lo primero que debemos hacer es cambiar la creencia de que el aburrimiento es un problema. El aburrimiento no es un enemigo, sino una oportunidad para que los niños desarrollen su creatividad, independencia y habilidades para resolver problemas. Al no intervenir de inmediato, les permitimos explorar sus intereses y descubrir nuevas formas de entretenerse.
Aquí hay algunas sugerencias para ayudar a tus hijos a gestionar su aburrimiento:
- Crear un "frasco del aburrimiento": Llénalo con ideas de actividades que ellos puedan hacer solos, como leer un libro, dibujar, construir con bloques, o inventar un juego.
- Fomentar la creatividad: Proporciona materiales de arte, bloques de construcción o disfraces para que ellos mismos inventen juegos y proyectos.
- Establecer tiempos sin pantalla: Limitar el uso de dispositivos electrónicos para que los niños busquen otras formas de entretenimiento.
- Proyectos a largo plazo: Anima a tus hijos a embarcarse en proyectos que requieran más tiempo, como montar un puzzle grande, aprender una nueva habilidad o trabajar en una manualidad.
- Modelar el comportamiento: Muéstrales cómo tú mismo/a gestionas tu tiempo libre y te enfrentas al aburrimiento. Pueden inspirarse en tus pasatiempos y actividades.
- Ofrecer opciones, no soluciones: En lugar de decirles exactamente qué hacer, ofrece varias opciones y deja que ellos elijan. Esto les da la sensación de control y les ayuda a tomar decisiones.
Al enseñar a nuestros hijos a manejar su aburrimiento, les damos herramientas valiosas para la vida. La independencia, la creatividad y la capacidad de resolver problemas son habilidades que les servirán en el futuro y les ayudarán a convertirse en adultos autónomos y resilientes.
Si deseas obtener información con cualquier otro tema relacionado con la crianza de los hijos, no dudes en escribirnos.