El arte de cuidarnos: Más allá del cuerpo
Elisa Sainz • 17 de diciembre de 2024

Hace un tiempo asistí a una conferencia maravillosa impartida por la psicóloga chilena Pilar Sordo. Uno va a estos eventos, aprende, disfruta y se inspira, pero siempre hay frases que se quedan, que te marcan, que regresan a ti en el momento justo.


En algún punto de la charla, Pilar mencionó algo que me resonó profundamente: “Si te quejas porque tienes que cuidarte, imagínate cuidar más de un cuerpo: el físico, el mental y el espiritual.”


Hoy, mientras esperaba en la consulta del médico con una congestión inmensa, recordé esa frase. Llevo días con alergias, problemas para respirar y agotamiento, y me encontré preguntándome: ¿Qué he estado haciendo mal? ¿En qué momento dejé de cuidarme? Porque cuidar solo el cuerpo no es suficiente. Somos un todo, y si una parte de nosotros está descuidada, las demás también lo sienten.


Hoy quiero hablarte del autocuidado, de las áreas esenciales en las que debemos trabajar para poder funcionar bien, para vivir mejor, ya seas madre, padre o simplemente alguien que quiere sentirse más pleno y en equilibrio.


1. Cuidar el cuerpo físico 🏃‍♀️💧


Tu cuerpo es tu hogar, el lugar que te permite moverte y disfrutar la vida. Pero, ¿cómo lo estás cuidando?



  • Alimentación consciente: Comer de manera saludable, con alimentos que te nutran y te den energía, no solo por costumbre o ansiedad.
  • Actividad física: No necesitas correr maratones, pero moverte, caminar, estirarte o bailar mejora tu salud y tu estado de ánimo.
  • Descanso y sueño: Dormir bien no es un lujo, es una necesidad para tu cuerpo y mente. Pregúntate: ¿estás priorizando tus horas de descanso?


2. Cuidar la mente 🧠✨


La mente es como un jardín: lo que siembras en ella, crecerá. Si llenas tu mente de preocupaciones y pensamientos negativos, eso será lo que coseches.


  • Tiempo para desconectar: Unos minutos de silencio, de lectura o de meditación pueden ayudarte a calmar la mente y a reducir el estrés.
  • Aprender a decir NO: No puedes hacerlo todo. Establecer límites te protege del agotamiento mental.
  • Nuevos aprendizajes: Desafiar tu mente con nuevos conocimientos, hobbies o reflexiones mantiene tu cerebro activo y tu espíritu entusiasmado.


3. Cuidar el espíritu 💖🌿


El espíritu es la parte más profunda de ti. Cuando descuidamos esta área, sentimos un vacío que el mundo exterior no puede llenar.


  • Tiempo para ti: ¿Cuándo fue la última vez que hiciste algo que te hiciera feliz? Leer un libro, pintar, escuchar música o simplemente disfrutar un café.
  • Conexión con algo mayor: Puede ser espiritualidad, naturaleza o simplemente estar presente en el momento.
  • Gratitud y amor propio: Reconocer lo que tienes, lo que eres y lo que has logrado es una manera poderosa de alimentar tu espíritu.


El autocuidado no es egoísta, es necesario 🌟


Recordar esa frase de Pilar Sordo en la consulta del médico fue como una alerta suave para mí: “Cuidarme no solo es importante, es fundamental.” Porque cuando yo estoy bien, puedo dar lo mejor de mí a mi familia, a mis hijos, a mi trabajo, pero sobre todo, a mí misma.


Así que hoy te invito a preguntarte:

  • ¿Qué área de tu vida estás descuidando?
  • ¿Qué puedes empezar a hacer hoy para cuidarte mejor?


Cuidarse no es un acto de lujo ni de egoísmo. Es un acto de amor propio y de respeto hacia ti mismo y hacia las personas que te rodean. Porque para poder dar lo mejor a los demás, primero debemos aprender a darnos lo mejor a nosotros mismos.


¿Y tú? ¿Cómo practicas el autocuidado en tu vida diaria? Me encantaría leerte en los comentarios.